Admiro a Cassey Ho. En la última Newsletter (¡apúntate!) os decía que estoy esperando su libro. Gracias a ella hago pilates en casa. A pesar de que es una famosa entrenadora personal, ella sufre el bulling en sus propias carnes. La acusan de no tener el cuerpo perfecto y, por tanto, de no tener autoridad moral como para enseñar a sus seguidores a cuidarse: "estás gorda", "no deberías entrenar a gente estando así", "no tienes los abdominales marcados", "culo plano",...
Esta ha sido la respuesta de Cassey. Dos minutos de maravilla técnica, de profunda reflexión y de callar bocas de una vez por todas sin tener que decir una sola palabra:
Tras cambiar a lo que la gente cree que es "su" cuerpo perfecto... ¿es feliz?
¿Por qué la imagen de "mi" cuerpo perfecto tiene que estar construida a partir de lo que es "su" (el de ellos) cuerpo perfecto?
Construir la propia identidad a partir de la ajena. Cuánto daño.
La pregunta es ¿cuál es MI cuerpo perfecto? ¡No el de ellos!
Aparte de lo obvio, claro, que es que nadie con dos dedos de frente le puede toser a esta mujer...
¡Pasad un buen fin de semana!
