Mostrando entradas con la etiqueta novela. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta novela. Mostrar todas las entradas

Reto de lectura: el rosco de Pasapalabra.

29 enero 2013

Dentro de mis propósitos de año nuevo está el de leer más, pero no sabía cómo animarme a mí misma hasta que se me ocurrió auto-proponerme y proponeros un reto de lectura:


  • Consiste en leer este año tantos libros como letras tiene el abecedario (27).
  • Cada letra debe corresponder con la inicial del apellido del autor del libro.
  • El apellido debe ser aquel por el que sea conocido el autor (a veces se le conoce por el primer apellido, otras por el segundo). Si es conocido por los dos, pues por el primero. (ej. García Márquez cubre la G).
  • Como en el programa Pasapalabra, las letras raritas (ej. la ñ) se pueden sustituir por un apellido que las contenga ("contiene la ñ").
  • No hace falta ir letra por letra en orden. Puedes decir Pasapalabra y seguir con otra letra. La cuestión es completar el rosco.
  • Leer una trilogía no da dos letras comodín. La intención es abrirnos a nuevos autores.
  • En vuestros blogs se irán colgando las reseñas de los libros. Si no tienes blog no pasa nada, pero participa comentando, dando ideas de libros, recomendando,...


De imagen del reto podéis coger este rosco, quizá hacer un montaje con vuestra foto, mascota, etc. Quedaría simpático ir sustituyendo las bolitas azules por verdes cuando se haya "leído esa letra".


¡A leer! Espero que os animéis muchos y así (re)descubramos juntos el placer de la lectura. Dejadme un comentario y así nos vamos conociendo y apoyando unos a otros. ¿Recomendaciones?

¡Besos marujiles!

Cuidado con el ángel... y con engancharse a telenovelas.

11 enero 2013

"¿Qué hace una chica como tú mirando una telenovela como esa?", os preguntaréis.

Durante el paro (y lo sabe la gente que pasa muchas horas en soledad) la televisión me hizo muchísima compañía. A veces realmente sentada viendo algo. Otras veces simplemente como ruido de fondo. A todos los Sálvame, Gran Hermano (lograron que tuviera un horario de comidas), Callejeros, Ana Rosas,... mis respetos.

En ese periodo me enganché a una telenovela: "Cuidado con el ángel". La emiten en Antena 3 Nova, pero ahora va muy avanzada. Si queréis verla en una de esas tardes de soledad, manta y Cola Cao, os recomiendo http://www.tusnovelas.com. En esta página podéis ver online muchísimas novelas, sin necesidad de descargarlas, incluso las que están poniendo ahora en televisión, como es el caso de "Cuidado con el ángel".



El caso es que si tenéis ganas de novela pero no queréis sobrevivir a 300 capítulos, esta novela es para vosotros, ya que ya os digo hasta dónde la debéis ver: hasta que se casa la parejita, cosa que sucede en el episodio 32. Con ese capítulo la historia queda más o menos cerrada y conclusa, bonita y redonda. El resto (hasta el capítulo 195) es darle vueltas al tema, complicarlo, sacar argumentos los haya o no los haya y alargar la historia agónicamente. No merece la pena. Si la veis hasta el capítulo 32 os quitáis las ganas de telenovela y no sacrificáis mucho tiempo: en 32 capítulos tenéis lloros, tíos buenos, risas, traumas, malas malísimas, bodorrio y noche de bodas. ¿Para qué queréis más?


La historia recuerda un poco a otra: la de "Amarte así, Frijolito". Él (William Levy), médico. Ella (Maite Perroni), traumatizada por haber sufrido una violación de joven. No se acuerda de quién fue, pero ¿adivináis quién? De todos modos, ese no es el argumento principal, no al menos en esa primera parte de la novela (hasta el episodio 32). El argumento es "My fair lady". Ella, huérfana sin modales e inocente cual cervatillo. Él, con mansión y tableta incorporada, se propone cuidarla y hacer de ella una mujer de pro.

¿Que por qué me gustaba la novela?
Porque ha sido la primera que veo en la que él llora más que ella. Ella ni se pispa de que él la quiere. Y él venga a llorar y venga a llorar.



¡Por fin se invierten "los papeles" en una novela, ya era hora! Porque en el amor todos somos iguales y sí: los hombres buenorros también lloran. Aunque se sigue con el mito hombre protector - mujer pobrecilla, al menos se rompe con ciertos tópicos machistas.

Y mira que yo soy de morenos, pero este qué penita me daba, pobrecito mío...




Hijo mío, si con verte al espejo te consuelas tú solito...

William Levy leyendo LTM

¡Besos marujiles!
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...