Mostrando entradas con la etiqueta casero. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta casero. Mostrar todas las entradas

Cómo hacer aceite y manteca de coco casero. ¡Sólo dos ingredientes!

09 julio 2015

Por fin aparezco por aquí: ¡ya era hora! Y lo hago con un nuevo vídeo que acabo de subir al canal de Youtube ¡¡¡bieeeeeeennnn!!! Ha sido un suplicio, creo que lo habré subido tres veces, pero como dicen: a la tercera va la vencida. Se trata del tutorial de la receta para hacer manteca y aceite de coco casero, algo que ya os había contado en el blog hace unos dos años, pero del que no había grabado aún el paso a paso. ¡Allá va! Una recetilla perfecta para esta temporada de playa, sol y piscina, que deja el pelo estropajoso. Al menos el mío :(




Como pongo en el título del vídeo, hacer aceite o manteca de coco en casa es fácil y está al alcance de cualquiera, ya que sólo hacen falta dos ingredientes... y uno es el agua :D

El otro es la ralladura de coco, que podréis encontrar en los supermercados e hipermercados en la sección de ingredientes para dulces o incluso donde están los frutos secos. También se la conoce como harina de coco y es muy barata.




En realidad, la manteca y el aceite de coco son lo mismo. Lo que pasa es que el aceite solidifica en torno a los 25 grados, convirtiéndose en una manteca. De ahí que en verano sea líquido a temperatura ambiente y en invierno al revés (al menos en estas latitudes).

No he querido complicar la receta con conservantes y antioxidantes: si hacéis poca cantidad y la gastáis en pocos días no le daréis tiempo a que se ponga malo. De todos modos, si conserváis la manteca o aceite de coco casero en la nevera os aguantará un poquito más antes de que se ponga rancio. Fuera de la nevera aguanta unos cinco días, dentro unos diez. De todos modos os daríais cuenta por el olor. Lo mejor es hacer poca cantidad e ir haciendo más a medida que necesitéis: total, ¡no se tarda nada!



Como os comentaba en aquel post antiguo con el paso a paso de cómo hacer manteca de coco, con la ralladura sobrante podéis haceros un exfoliante y con el agua de coco un flusflus (spray) refrescante, hidratante,... ¡y con un olor rico-rico!

Si hacéis la manteca de coco con agua normal (no destilada) podéis consumirla como alimento incorporándola, por ejemplo, a vuestros dulces, sustituyendo la mantequilla de la tostada mañanera,... Y el agua podéis bebérosla (rica en minerales... y en grasa, yo aviso) o echarla en los batidos. Les da un toquecillo a playa y chiringuito delicioso.




¡Ah! Recordad: el truco para que salga la receta es estrujar bien la ralladura de coco, como veis en el vídeo. La grasa (la manteca o aceite, vamos) es como si estuviera "agarrada" a la ralladura. Comprimid como si no hubiera un mañana y os aseguro que la manteca sale ;)

Sobre los usos del aceite de coco he hablado bastante (por ejemplo cuando hablé del aceite de coco Spectrum), aunque nunca es poco, porque tiene mil y un usos:

Como bálsamo labial
♥ Para mascarillas prelavado nutritivas para el pelo
♥ Para hidratar las puntas con el pelo seco
♥ Para afeitar las piernas
♥ Como desmaquillante
♥ Para hidratar las cutículas
...

¡No os lo podéis perder!



¡Un beso enorme a todos!
¡Feliz arranque de vacaciones a los que ya las estáis disfrutando!

Cosmética DIY: bálsamo labial. Tutorial en Youtube!

07 abril 2013

Acabo de subir un nuevo vídeo de mi canal de Youtube de cosmética natural hecha en casa. Esta vez se trata de un tutorial para hacer bálsamo labial.

El bálsamo labial es una de las cosas más sencillas de hacer, con las que se empieza en este hobby. Así que espero que os animéis y, si no, que al menos os parezca curioso.

¿Qué beneficios aporta un bálsamo cuyo primer ingrediente es la parafina o el aceite mineral? Sí, establecen una barrera con el exterior y sirven de vehículos de otros ingredientes, pero en sí ¿qué aportan? ¡Mejor nos lo hacemos nosotros!

Hace ya un tiempo os puse el tutorial en este blog (aquí), pero supongo que viéndolo en movimiento todo es más ameno y parece más fácil.


Como os digo en el vídeo, las proporciones de los ingredientes van a gusto de cada uno. Es lo bonito de hacer nuestros propios potis: acabamos haciéndolos a nuestro gusto. Os he puesto las proporciones que dan un bálsamo que a mí personalmente me gusta. Lo podéis hacer más duro, más blando, en stick, en tarrito, cambiando la manteca por otra, el aceite por otro, usar otra cera, mezclar varias mantecas o aceites o ceras, con o sin aroma,... ¡Contadme vuestros experimentos!

¡Besos y buen arranque de semana a todos!

Cosmética DIY: tutorial del gel de ácido hialurónico.

17 marzo 2013

El otro día os hablé de mi rutina de cuidados para la cara (aquí) y, al mencionar el ácido hialurónico, me preguntásteis si me lo hacía yo. Y así es: me lo hago yo en casita.



Como es cosa sencilla y muy pero que muy efectiva, me he animado a preparar un vídeo explicando cómo se hace el gel de ácido hialurónicoPoco a poco me gustaría que estos vídeos fueran configurando un canal de Youtube... Iré editando esta entrada respondiendo a dudas.

Me río yo de la loción de HadaLabo! En sasa.com la tenéis por 14,30 dólares (ahora de oferta) los 170 ml, pero no es gel de ácido hialurónico puro, ya que va acompañado de otros ingredientes. En cambio por 5 euros podéis hacer 100 ml al 1% de concentración. No me enrollo mucho, porque de esa loción se ha hablado bastante. Tiene de bueno que usa tres tipos de ácido hialurónico con distintas densidades (cada uno logra penetrar a más o menos capas de la piel)  peeeeero todos están en proporción más pequeña que el conservante (un parabeno), que ya quisiera saber la proporción real de hialurónico que lleva... Os dejo nada más su INCI, para que lo veáis:


Ingredientes: Water, Butylene Glycol, Glycerin, PPG-10 Methyl Glucose Ether, Methylparaben, Disodium Succinate, Sodium Hyaluronate, Hydroxyethylcellulose, Succinic Acid, Hydrolyzed Hyaluronic Acid, Sodium Acetylated Hyaluronate.

Venga, menos cháchara y más vídeo. Poneros cómodas/os y no seáis demasiado crueles.


Espero que os sea útil (o al menos curioso) y que os animéis a hacerlo!

¡Besos marujiles!

Water spotted nails: tutorial paso a paso.

13 febrero 2013

Hoy os traigo un tutorial para que os podáis hacer la nueva manicura con que arranca el 2013: las water spotted nails, algo así como las uñas de topitos hechas con agua.



¿Recordáis el efecto craquelado en las uñas? Cómo olvidarlo, ¿verdad? Fue una de las manicuras que me gustaba ver pero que no me convencía para hacérmela yo, sobre todo si implicaba gastar dinero en un esmalte que probablemente usara sólo un par de veces. Pues bien: el efecto de las "water spotted nails" es similar, pero en lugar de romperse el dibujo en líneas rectas se rompe en líneas curvas.

Lo mismo que para el craquelado había esmaltes especiales para lograr ese efecto, también existe un esmalte para el efecto "spotted". Se trata del esmalte OPI spotted nails, en negro. Sin embargo, este esmalte es muy difícil de conseguir y, por normativa sobre ingredientes, se puede vender sólo en algunos países, como en Francia.

Pero no pasa nada, porque ¡podemos lograr el mismo efecto en casa y sin necesidad de comprar ningún esmalte especial! La primera vez que hemos visto esta técnica, y por tanto la persona a la que hay que otorgar todo el mérito, fue en el canal de Youtube de Cutepolish, un canal totalmente recomendable. Aquí su vídeo con la técnica.



El quid de la cuestión es que al pulverizar alcohol sobre esmalte que flota en agua se consigue que el esmalte se retire en aquellos puntos donde cae el alcohol. Recurriendo al mismo procedimiento que se usa para la manicura water marble, ese esmalte-queso gruyer se transfiere a la uña previamente pintada en un color de contraste, que será el que se entrevea a través de los agujeritos.

Paso a paso
  1. Pintamos las uñas de un color base.
  2. Protegemos la piel de alrededor de las uñas con esparadrapo o vaselina. Yo uso el esparadrapo ese que se rompe con las manos, que pega menos que el normal.
  3. Ponemos agua en un recipiente y dejamos caer unas gotas de esmalte de otro color y que sea bastante cubriente. No se deben dejar caer desde muy alto, ya que si no al caer con tanta fuerza rompen la tensión superficial del agua y se irían al fondo del recipiente.
  4. A continuación pulverizamos con un spray algún producto que contenga alcohol (colonia, tónico comercial,...) o quitaesmalte. Lo suyo es usar un spray de pulverización fina. El tamaño de los huequitos redondos por donde asomará el esmalte de base depende de las veces que pulverizamos: a más veces, más pequeños serán los "spots". Y por el contrario, si pulverizamos sólo una vez tendríamos pocas pompitas.
  5. Con el esmalte de base bien seco y los dedos protegidos con esparadrapo, hundimos cada uña (con ésta mirando hacia el agua). El esmalte que flota se adhiere a la uña en cuanto ésta entra en contacto con él. Antes de retirar la uña del agua es conveniente apartar el esmalte flotante con un palito.
  6. Dejamos secar. Retiramos el esparadrapo y protegemos la manicura aplicando un top coat. ¡Listo!


¡Probad esta manicura! Aunque es entretenida es realmente fácil. Yo al principio temía que fuera como la water marble, que no me sale bien. Pero esta sale bien incluso a la primera, así que no desechéis esta manicura pensando en la marble.

¡Besos marujiles!

Cosmética DIY: tutorial de mi crema hidratante facial. Por fin!!

19 julio 2012

Hoy os traigo el tutorial de mi crema hidratante para la cara. Para mí es mucho mejor de las que se venden. Hay muchos tutoriales en internet sobre cremas, pero que no son cremas sino mascarillas. Este es de una crema hidratante de verdad. La expectación que ha habido con este tutorial, señores!

Por favor, no lloréis.



Ya os conté que se me agotó el emulsionante, volví a las cremas del fondo del armario y vuelta a empezar con rojeces, granitos y un brote de dermatitis. Por no hablar de una alergia que me dio una crema para el cuerpo, por lo que me pasé tres días de color rojo y con una urticaria tal que parecía un perro con pulgas, todo el día con la patita rascándome.

Eso no se le hace a este cuerpazo.

Así que en cuanto llegó el pedido me he hecho cremita, haciendo fotos para enseñaros el tutorial.


Tía Maruja for president YA.

Advertencia
Hay que lavar, desinfectar, aclarar y secar todos los instrumentos y recipientes que vayamos a utilizar. Además, pesaremos todos los ingredientes con una balanza de precisión: nada de guiarnos con cucharas, ya que habrá ingredientes que ocupan mucho pero pesan poco y viceversa.

Ingredientes
La gracia está en que aprendáis a formular las cremas. Sólo así podréis crear una adecuada a las necesidades de vuestra piel, que es de lo que se trata y lo maravilloso del tema. Por tanto, estas proporciones e ingredientes están seleccionados y formulados de acuerdo a lo que yo, tía Maruja, veo que necesita mi piel a mediados de Julio del 2012. Seguramente, no valga esta misma crema para la tía Pili ni para tía Maruja dentro de dos meses, ni tampoco si me vuelvo alérgica a alguno de sus componentes. Además, y aunque aún me mantengo lozana y fresca (pffff) me ha dado últimamente por el tema de la prevención arruguil (los 30 vienen a la de ya a lo espada de Damocles), por lo que he formulado esta crema casi como si de una antiarrugas se tratara.

Fase A:
74,2 gramos de Agua destilada (Mercadona)
5 gramos de Glicerina vegetal (Aromazone)
0,2 gramos de Goma xantana transparente (Aromazone)

Fase B:
1 gramo de Aceite de jojoba (herbolario)
1,5 gramos de Aceite de macadamia (Aromazone)
1,5 gramos de Aceite de aguacate (Gracefruit)
2 gramos de Aceite de sésamo (Aromazone)
1,5 gramos de Aceite de germen de trigo (Gracefruit)
1,5 gramos de Aceite de semillas de cranberry (Gracefruit)
gramo de Vitamina E (Gracefruit)
1 gramos de Manteca de karité (Aromazone)
gramos de Olivem1000 (Gracefruit)

Fase C:
gramo de Vitamina B5 (Aromazone)
0,5 gramos de Alantoína (Aromazone)
gramos de Aloe vera (Aromazone)
0,5 gramos de Colágeno vegetal (Aromazone)
0,6 gramos de Conservante Cosgard (Aromazone) (equivale a 19 gotas según el fabricante)

pH 6.0 ajustado con Acido láctico (Aromazone) Bicarbonato de sodio (Mercadona).

Aceite esencial de tea tree (Aromazone) Fragancia cosmética (Gracefruit).

Nota: compro ingredientes online porque en herbolarios te sajan. Hay tiendas como Riesgo (en Madrid) que también vende ingredientes, pero para cremas no me suelo abastecer allí, porque suelen tener aceites refinados y para este tipo de productos prefiero aceites bio, sin refinar y demás. Creo que así conservan mejor sus propiedades. Aromazone y Gracefruit tienen calidad las dos. Aromazone es más cara pero tiene cosas más raritas. Gracefruit es conocida sobre todo por sus fragancias cosméticas y tiene buenos precios.

Paso a paso
Como ya os he comentado en anteriores entradas dedicadas al reto LTM, hacer una crema tiene tres fases y que se trata de hacer una emulsión. (aquí y aquí)

Fase acuosa

  1. Peso con una balanza de precisión la goma xantana.
  2. La disuelvo en la glicerina vegetal. La goma xantana mejora la estabilidad de la emulsión.
  3. Añado el agua destilada (podría haber sido también una infusión o un hidrolato), doy unas vueltas con una cucharilla y dejo reposar aparte. Solito, sin tocarlo, se formará un gel. Mientras, paso a la fase oleosa.

Fase oleosa

1. Peso con una balanza de precisión la manteca y los aceites no termosensibles que voy a echar, así como el emulsionante. Yo estoy utilizando el Olivem1000.

En la fase oleosa está la clave para formular bien una crema. Para hacer una fase oleosa correctamente, hemos de tener en cuenta varias cosas:

Primero: El porcentaje de grasas que queremos que tenga nuestra crema, dependiendo del tipo de piel que tengamos y sus necesidades (no es lo mismo en verano que en invierno, por ejemplo). Para mis necesidades actuales he decidido que la manteca y los aceites (no se considera aquí el emulsionante) sean un 10% de la fórmula. En una piel grasa yo no superaría el 8%. En una seca podríamos elevar el porcentaje hasta un 15%.

Segundo: Las propiedades de los aceites. Por ejemplo, en esta receta he usado aceites muy ricos en antioxidantes y reconocidos por sus propiedades "antiage".

Tercero: La cascada de grasas. Esto significa que al formular no podemos poner un sólo aceite ni tampoco la misma cantidad de todos los que pongamos. Este concepto lo he aprendido de webs, foros y libros extranjeros.

  • Debemos poner, al menos, una manteca, un aceite ligero, uno medio, uno pesado y una cera (el emulsionante). La mayor o menor ligereza del aceite viene dada por su densidad, cada uno tiene una densidad distinta que hay que conocer y que se puede consultar en su ficha técnica, en la wikipedia o en algunas tablitas que circulan por ahí.

  • Además, las cantidades de cada uno de los aceites debe graduarse según cómo queremos que sea la crema. Si la queremos ligera, pondremos más cantidad del aceite ligero, algo menos del medio y todavía algo menos del pesado y de la manteca. En esta gradación (la cascada) no se tiene en cuenta a la cera, el emulsionante, cuya proporción viene dada en su ficha técnica. No es algo que podamos formular nosotros, aunque sí decidir dentro del tramo aconsejado, ateniéndonos a las indicaciones del fabricante, según la queramos de textura más ligera o más densa, con cuerpo. Yo la quería más bien ligerita porque me gusta que vayan en recipientes airless y no en tarros.
2. Para hacer la emulsión, tanto la fase acuosa como la oleosa deben estar bien calientes. Esto es porque he usado un emulsionante en caliente, aunque existen emulsionantes en frío que no requieren calentar las dos fases (o al menos la fase oleosa sólo lo justo para derretir la manteca). Se derriten al baño María los aceites, manteca y emulsionante.

3. Doy un golpecito de batidora a la fase acuosa y la meto en el microondas para que se caliente bien.

4. A continuación realizamos la emulsión. Para ello incorporo poco a poco las grasas derretidas en el gel, mezclando con la batidora. Inmediatamente, la mezcla se volverá blanca y al meter una cuchara y sacarla ésta se queda manchada de crema: la emulsión se ha realizado correctamente.

Al principio la emulsión será muy líquida, pero al irse enfriando se hará más y más densa. Para acelerar este proceso, suelo batir metiendo el recipiente dentro de otro lleno de agua fría (el que veis en la foto de color azul).

Dejamos el recipiente aparte para que se enfríe.



Fase de enriquecimiento
1. Mientras se va enfriando la emulsión peso los activos cosméticos que quiero añadir y los aceites termosensibles. Si los hubiera echado en caliente hubieran perdido sus propiedades. Aunque los echemos en esta fase, al formular forman parte de los cálculos para armar la cascada de grasas, como el resto de aceites.

El resto de ingredientes de esta fase se formulan atendiendo a las proporciones que sugieren las fichas técnicas de los productos.

Cuando la emulsión esté fría, de tiempo, vamos incorporando estos ingredientes, batiendo y mezclando bien uno tras otro.

Por costumbre yo incorporo la vitamina E en este momento, aunque se puede incorporar en la fase oleosa, a la que pertenece (no le afecta el calor).

2 y 3. Hay algunos ingredientes que cuesta incorporar en la crema, como la alantoína. En ese caso lo que hago es disolverla en aloe vera con la ayuda de un batidor de leche (que por supuesto sólo uso para estos menesteres y que lavo y desinfecto previamente como se debe). El aloe vera es transparente, sólo que por no manchar tazas lo eché en la misma donde había pesado los aceites y los activos, de ahí que veáis en la foto ese color ámbar.

4. Añado el conservante. Estoy utilizando el Cosgard, ya os hablé de él y de sus alternativas en el post específico sobre conservantes y antioxidantes (aquí). Me asegura conservación entre 3 y 6 meses, cubre hasta un pH de 7.0 y tiene certificado Ecocert.



Medir el pH y toques finales
Os hice un post específico sobre el pH (aquí), que recomiendo que releáis. Es fundamental medir el pH y ajustarlo según el tipo de producto que estemos haciendo (no es lo mismo el pH de una crema que el de una mascarilla capilar), el conservante (cada uno conserva productos en un rango de pH determinado), nuestro tipo de piel,... En el post sobre el pH os hablo de estas cosas. También os hablé en él de cómo ajustar el pH al que deba ser. Yo juego con ácido láctico y una disolución saturada de bicarbonato de sodio.

En la primera medición me daba un 5.0. Al echar unas gotas de solución de bicarbonato me saltó a 6.5. Por prudencia (el conservante que uso cubre hasta un 7.0) bajé de nuevo el pH con unas gotas de ácido láctico.

Y ya por último, incorporamos los aceites esenciales y fragancias.



¡Y ya está la crema!

Resultados y reflexiones:
Piel recuperándose de los estragos de las mierdicremas comerciales (ojo, que aquí meto Ponds, The Body Shop, Dior,... me da igual el precio), jugosa y luminosa, hidratada de verdad y sin ingredientes taponadores de poros ni mierda. El efecto arruguil no sé deciros, no tengo arrugas aún (jurjurjur), la que debe pronunciarse es mi santa madre (o tía Maruja con un par de disgustos más encima).



Por otro lado, me gustaría resaltar unas cuantas cosas.

El ahorro que supone hacerse los potis en casa. ¿Os podéis imaginar cuánto puede costar una crema de estas características en el mercado? En concreto lo digo por el colágeno que contiene y por el aceite de cranberry (y por el de germen de trigo, el de aguacate,...) Si investigáis un poco, el aceite de cranberry es un ingrediente de auténtico lujo aún por explotar por las casas cosméticas. Ya nos han metido las bebidas de arándanos en el supermercado (rollo importado de los países nórdicos y UK), pero aún no en cosmética. El tema es que la extracción de su aceite es algo inventado recientemente. Y no hay aceite vegetal con más vitamina A. Al tiempo. Y ya veremos cuánto costará una crema con dicho ingrediente. Peeeero si una compra el aceite (u otros) y se hace la crema, el ahorro es brutal. Os estoy diciendo que el coste por tarro sale a precio Ponds. O menos.

Está claro que al principio una sufre los gastos de envío de los primeros pedidos. Después, una vez abastecida, el coste por producto es mínimo, incluso metiendo aceites como el que os comento.

Nota: Si alguien de Madrid quiere hacer un pedido... ¡que me avise! A lo mejor me interesa y compartimos gastos :)

Por otro lado, evitamos engaños. Las cremas comerciales se venden anunciándose como que tienen vitamina E, colágeno, pantenol y no sé qué, pero: ¿en qué cantidades? Pues ya os lo digo: mínimas, apareciendo al final del INCI y acompañadas de mierdas que consiguen incluso contrarrestar el efecto beneficioso de sus ingredientes más nobles. Un ejemplo es el que os conté de la Tea Tree Skin Clearing Lotion de The Body Shop, que junta siliconas (obstruyen los poros, eso sí, tacto suave garantizado) y aceite de árbol de té (purificante y antibacteariano). Resultado: hacer el gilipollas.

Ya para acabar (¿realmente alguien ha leído hasta aquí?): las cremas DIY no testan en animales. No maltratamos a ningún bicho. Para investigación médica pues qué queréis que os diga, yo ahí me callo (que me toca de cerca y debo no hacer otra cosa sino agradecer). Pero para cosméticos testar en animales supone sufrimiento gratuito e innecesario.

¿Os animáis?

¡Besos marujiles!

¿Te ha gustado el post?
¡No te pierdas nada! Haz click:


Cómo hacer jabón paso a paso: tutorial con fotos!

02 abril 2012

¡Hola!

Hoy os traigo un tutorial para hacer jabón en casa. Es fácil, relajante, gratificante y recuperamos una tradición de época de nuestras abuelas.

Ellas usaban aceite reciclado. Con aceite usado de la freidora (colados los posos), por ejemplo, se puede hacer un jabón estupendo para fregar. Si no tenéis, pedidlo a la vecina o al bar, estarán encantados de dároslo y no tener que ir a tirarlo al punto limpio (sí: los aceites se llevan a un punto limpio, no se pueden tirar por el fregadero, son súper contaminantes!!!!). El jabón de aceite reciclado no huele a fritanga, la sosa se come los olores.

Si usamos aceite limpio, podemos usar el jabón para lavarnos, beneficiándonos de las propiedades de cada aceite y las cosillas que le echemos al jabón (arcillas, aceites esenciales,...) Nada que ver con los jabones comprados. Sobre todo si se tienen problemas de piel, irritaciones, bebés, etc,... vamos, yo no me lo pensaba.

El jabón es, básicamente, agua, sosa y aceite. Manipular la disolución de sosa y agua es peligroso (produce una reacción que emite vapores tóxicos y puede provocar quemaduras si te salpica). Por eso lo primero que os tengo que contar es que hay que adoptar una serie de medidas de seguridad:
  • Gafas de seguridad (o las de la piscina) y mascarilla (la compré en Leroy Merlín).
  • Guantes de los de lejía.
  • Ir vestidos apropiadamente (no hacer esto en bikini).
  • Tener a mano una botella de vinagre abierta: si salpica la sosa, el vinagre la neutraliza.
  • No usar nada de aluminio. Mejor cristal, cuchara de madera, cubos de plástico,...
  • Los instrumentos que usemos para hacer jabón sólo los usaremos para eso, incluída la batidora. Yo compré una de esas de 10 euros.
  • Las medidas son importantes, es necesario pesar los ingredientes.
  • Que no haya niños ni mascotas pululando mientras hacemos jabón. Recluídlos en un lugar cerrado, ponedles un vídeo, llamad a Teleabuelo, lo que sea. Pero nada de "Mamá, qué haces?? A veeerrr!!?? Tocarrrr".
  • Haced jabón en un sitio bien ventilado.
Para saber las proporciones de cada cosa, es bueno usar una calculadora de saponificación, como ésta. En ella se eligen los aceites o mantecas que queremos que tenga nuestro jabón y vamos jugando con las cantidades. Nos devuelve la cantidad de agua y sosa que necesitamos y las características que, con esas proporciones que estamos poniendo, tendría nuestro jabón.

Yo decidí hacer un jabón con aceites de oliva (300 g), coco (80 g), almendras dulces (40 g) y mantecas de karité (40 g) y mango (40 g). Pero porque era mi segundo jabón. El primero simplificad y haced uno de oliva y coco y ya. O de oliva sólo. No os compliquéis para empezar.

En lugar de agua me dio por poner una infusión de frutos rojos. El agua mejor bien fresquita, porque cuando añadamos sosa se liberará mucho calor y así no se nos sube tanto la temperatura.


Echad la sosa al agua, nunca al revés, ya que puede saltar! Yo lo hago por si acaso en el fregadero y en una jarra de cerveza que sólo uso para eso y que es práctica por eso de que tiene asa. Dad unas vueltas con una cuchara de madera y dejad enfriar, ya que la reacción generará mucho calor. Se pone a unos 90ºC. Iros a hacer ganchillo, a ver una tanda de publicidad de Antena3... y volved a la media hora. Una pena que la variación de pH tan bestia se haya cargado el colorcito de la infusión, me gustaba el color fresón... En fin, de ilusión también se vive.


Derretid en un puchero los aceites y las mantecas en el fuego. Si no ponéis mantecas, no hace falta calentar.


Echad los aceites en el recipiente de cristal o cubo de plástico donde vayamos a juntar todo.


Sobre los aceites, verted la solución de sosa. Dad unas vueltas con una cuchara de palo...


... y meted la batidora. Salpica bastante. Aquí veis cómo, previsora, tapé un poco la cocina con periódico.


Al principio la mezcla es líquida, pero poco a poco se irá haciendo más densa. Lo que tarde depende de la combinación de aceites, porque la primera vez me tardó más de media hora y esta vez un par de minutos.


El punto que debe tener la mezcla al final es como de natillas y se dice que "alcanza la traza". Es cuando se marcan surcos del batido, si hacemos una raya con la batidora se queda marcada (la traza) y si la batidora gotea se queda el chorretón sobre la mezcla. Mejor una foto.


En este momento se echan los aromas y los colorantes. Y luego se echa en moldes, preferiblemente de silicona para desmoldar mejor después. Me animé a usar una botella como molde. Yo no eché ningún colorante, pero sí eché aroma de mango y mirtillo a una parte de la mezcla. Dicen que, según los aromas, aceites esenciales, etc que eches, puede que se haga tan densa la mezcla que luego cueste un montón enmoldar. En mi caso tuve suerte y enmoldé sin problemas.

Golpead los moldes contra la encimera, para asentar la mezcla y tratar de que no queden muchas burbujas de aire atrapadas. A continuación hay que abrigar el jabón. Se envuelven los moldes con plástico transparente de cocina y se les abriga con toallas, mantas,... En estas primeras horas se inicia el proceso de saponificación y el jabón desprenderá mucho calor.

Como el vinagre neutraliza la sosa, yo friego la cocina y los cacharros que se han usado con vinagre y ya luego con el Fairy o lo que uséis. Vamos, que se queda todo como los chorros del oro.

Cuando veáis que el jabón ya está duro, al día siguiente o a los dos días, el jabón ya se puede desmoldar y cortar. El jabón que metí en la botella lo corté en lonchas, pero como el dibujo de la botella no era recto, salieron unas tajás muy... artesanales. Casi que me gusta más así, jejeje!! Se corta con botella y todo y luego se pela la rodaja del plástico como si fuera una loncha de chorizo. Si queréis que los bordes estén pulidos esperad a que endurezca mucho antes de sacarlo de la botella. Si no, queda a lo gotelé (que a mí me encanta!). Y el culo de la botella precioso. Para que veáis que no hace falta gastaros dinero en moldes, basta que no sean de aluminio!!! Así que si usáis bricks de leche forradlos antes de plástico de cocina. Lo que sobre de trocitos que se desprendan o se adhieran a los moldes no lo tiréis: haced una pelotilla o un dado de jabón.



En este momento se puede marcar el jabón con un sello comprado o hecho o hacerle dibujitos a punta de cuchillo.

Muy mono, sí, peeeeero no se podrá usar hasta que se cure, en unas cuatro semanas. Si lo usamos antes puede quedar sosa sin saponificar. Hay otro método llamado método en caliente (este que os he contado es en frío) que permite usar el jabón antes.

Hay que ser paciente!! Yo lo pongo a secar sobre una bandeja con un periódico (donde anoto la receta y la fecha en que está hecho) y un papel de cocina por si suda (la primera vez me pasó, soltó unas gotitas unos días, este lleva unos días y no ha sudado. Yo qué sé).

Ya la siguiente vez probaré a hacer algo más sofisticado, quizá a hacer dibujitos de distintos colores. Ya tengo mono!!!
Qué ganas de usar el jabón!! Olerá? No olerá? Hará espumita??? Ayayayayayyyy!!!! Qué paciencia hay que tener!!!

¡Besos marujiles!

¿Te ha gustado el post?
¡Apúntate a la Newsletter de LTM y no te pierdas nada! Haz click:



Caramel: cera depilatoria DIY

28 febrero 2012

Hace unas semanas pusieron en televisión la película Caramel: os la recomiendo. Ahora que las pelis no se pueden bajar y que apenas existen videoclubs, seguro que la podréis encontrar en vuestra biblioteca municipal.


Se trata de la película libanesa más exitosa de todos los tiempos. Narra las historias de un grupo de mujeres, cuya vida se desarrolla en torno a un centro de belleza en donde trabajan unas, se arreglan otras,... Creo que en su país la película debió de escandalizar por algunas de los temas que se tocan: la homosexualidad femenina, el de llegar o más bien no llegar virgen al matrimonio, los líos con hombres casados,... A mí me daba mucha curiosidad ver cómo una película musulmana trataba esos temas. ¿Y sabéis qué? Al final da igual la cultura, el lugar del mundo del que provengas: los sentimientos, las vivencias,... son iguales en todas partes.

En el centro de belleza hacían caramelo sin parar: lo cocinaban en unos recipientes, cogían pegotes, se lo metían en la boca (no sé para qué, supongo que para templarlo o para hacerlo más pegajoso) y lo usaban para depilar. Se trata del sugaring, una técnica depilatoria que usan mucho en Oriente Medio. De ahí el título de la película, Caramel.


En el mercado podemos encontrar algunas ceras depilatorias con azúcar e incluso alguna que sólo contiene azúcar y agua. Tras mucho mirar vídeos en Youtube sobre cómo hacer esa cera en casa, me di cuenta de que la dificultad no estaba en los ingredientes ni en las cantidades, sino en que el caramelo debe alcanzar una determinada temperatura y sin termómetro y guiándome a ojo... pues qué queréis que os diga: experimento fallido.

Sin embargo, sí he acertado haciendo caramelo en poca cantidad, la justa para depilarse... amos, lo que viene siendo el bigote. Así que hoy comparto con vosotras la recetilla.

La tía Maruja en fotos de archivo
Ingredientes:
  • Una cucharadita de azúcar (yo uso azúcar moreno que es el que tengo y también sale bien).
  • Una cucharadita de zumo de limón. Hay recetas que usan agua en lugar de zumo de limón. Yo no he probado con agua, pero con limón ni irrita ni nada.
  • Media cucharadita de miel.
Elaboración:
Se echan todos los ingredientes en una taza y se mete en el microondas 50 segundos al máximo (mi microondas tiene de máximo 800W). Si lo hacéis con azúcar moreno dadle 5 segundos más, porque tarda más en derretirse que el blanco. Como va a hervir que da gusto, yo lo que hago es interrumpir unas tres o cuatro veces la "cocción": cocina 10 segundos, paro 4 ó 5 segundos, sigo otros 10 y así.


Una vez cocinado el mejunge, sacamos la taza del microondas con un trapo o guante (está ardiendo!) y lo vertemos en un cuadradito de papel de horno (de horno, no una servilleta normal). Con la ayuda de una cucharilla, mezclar el mejunge.


Poco a poco la mezcla se va enfriando y notaremos que de ser líquida se va haciendo más y más pringosa y densa. Cuando veamos que no nos vamos a quemar (pasado un minuto de estar mezclando, aproximadamente), cogemos  la pasta con los dedos. Al principio está pegajosísima. La trabajamos con los dedos (en plan pellizcando, estirando, pellizcando y así) hasta que sí, sigue siendo pegajosa, pero ha cambiado de color a más opaco y más claro y vemos que lo que tenemos entre las manos es algo que va a funcionar como cera! De hecho, podemos hacer con el mejunge una pelotilla.

Al principio es líquido...

Poco a poco se va haciendo más denso...

Al final es tan denso que se "sube solo" a la cucharilla.

Es el momento de coger la mezcla y trabajarla con los dedos.
Se volverá una pelotilla de color claro.

Para depilar funcionamos sin bandas de tela/papel ni nada, aunque podríamos usar (yo esta vez las he usado, ya que en esta ocasión la pelotilla se me quedó algo blandita). Nos estiramos la pelotilla y ale, a dar tironcitos, con alegría (juasjuasjuas). Cualquier resto se va con agua. Para mí que es efectiva (la última vez nada más que quedaron dos pelitos sueltos que con la pinza desaparecieron y listo) y menos dolorosa que la cera normal. También es verdad que la anterior vez tuve que dar más tirones que con la cera normal, pero creo que cada vez que lo hago doy menos tirones. Es la maña que se le va cogiendo al tema.

Ahí podéis vislumbrar los protagonistas de la película posando para las cámaras.
Llenad la taza de agua y dejad la cucharilla dentro cuando acabéis con ella. Así luego es fácil fregarla.

Probadlo y me contáis! Y si alguien se anima a hacer en más cantidad, que me cuente el tiempo que lo deja en el puchero. Ya os digo que no me salió cuando lo hice y mira que había buscado información...

Otra cosa que me ha llamado la atención de los vídeos que he visto es que con esta técnica al depilar las piernas estiran el pegote en el sentido contrario al vello y arrancan a favor del vello. Se me hace muy raro! Con el bigote yo lo hago como siempre (estirar en el sentido del vello y tirón a contrapelo) y bien. Si alguien prueba al revés que me diga, pero me da que estirar la bolita (que es bastante durita) en sentido contrario debe de tirar mucho, no sé.

Recomendada la película y esta cera depilatoria casera. No sé por qué se la metían en la boca las protagonistas de la película, pero no recomiendo hacerlo después de depilarse (los pelillos no deben de estar ricos, no).

Un caramelo agridulce, por el limón y la miel, por el azúcar y el tirón,... como las historias de las chicas de Caramel... Como la vida misma... ¡Una metáfora preciosa!

¡Besos marujiles!

Piel de Ángel DIY: taller de Lush Valencia

06 febrero 2012

Hola a todos!

Hace unos días los chicos de Lush de Valencia organizaron un taller para enseñar a hacer con nuestras manos el famoso Piel de Ángel. Es de mis favoritos de la marca, para mí un imprescindible. Qué lástima que no fuera más cerca!

Sin embargo fueron tan majos que colgaron en su Facebook las fotos del paso a paso! Os las pongo. No me digáis que no le entran ganas a una de meterse en faena y hacérselo en casa... Por lo menos a mi ya me están entrando, que mi tarrito se me está acabando! (Consejo: no hacerlo a la vez que las albóndigas, a ver qué es lo que acabas friendo y a ver qué te acabas echando en la cara).

Lo primero, echan glicerina.


Después, agua.


A continuación, aceites esenciales.


Mezclar.


Echar kaolín (arcilla blanca).


Y finalmente, añadir las almendras molidas.


Trabajar a lo albóndiga.


Lo extienden sobre papel y "salpimentan" con flores de lavanda.




Se ayudan del papel para enrollarlo a lo sushi y cortan.


El proceso queda claro aunque tengo mis dudas:
  • Usan recipientes metálicos: nunca hay que usar recipientes o utensilios metálicos cuando se hace un cosmético con arcilla, si no pierde sus propiedades!!
  • Los aceites esenciales dejan un colorcillo verde, como si incluyeran un colorante... Es raro, los aceites que contiene Piel de Ángel, que yo sepa, no dan color... ¿Será el "Perfume" del INCI el que deja ese verde?
  • Según tengo entendido, cualquier cosmético con agua debe llevar conservante, ya que es campo de cultivo de bacterias. El INCI de Piel de Ángel no dice que lleva conservante y tampoco lo vemos en las fotos del taller. Es posible que no lleve, pero entonces, cómo es posible que aguante tres meses (aprox)? Tengo dos teorías: o bien el poder antiséptico de los aceites esenciales hacen que se pueda evitar usar conservante o bien al combinar agua con glicerina deja de ser tan urgente la necesidad de conservante. He leído por ahí que la glicerina es capaz de "encargarse" del 25% de su peso en agua, pero no sé en qué se basa esta afirmación. Osea que según esto para no ser necesario el conservante, debería haber una parte de agua por cada tres de glicerina... Lo que me mosquea es que los chicos no usen (al menos no se ve en las fotos) una balanza de precisión para medir lo que usan (lo que echa al traste esta teoría)... Que algún químico se manifieste!
  • Y finalmente, lo reconozco: me muero por la receta oficial, con cantidades y todo!


Realmente me tienta hacer esta receta: sus ingredientes (o parecidos) son fáciles de conseguir y lo mejor es que parece fácil de hacer...
Creo que me voy a animar a un potituneo...
(nuevo palabro! "Potituneo"!)

¡Besos marujiles!
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...